MOTOR DE BÚSQUEDA PARA ARTÍCULOS PERIODÍSTICOS

Autor  Periódico  Año 
Mostrar Introducción

La Defensa y la Marina, al Consejo General de Ciencia y Tecnología
Alejandro Canales Sánchez
Campus Milenio Núm 442 [2011-12-01]
 

Es probable que los titulares de la Defensa Nacional y de la Marina se integren al Consejo General de Investigación Científica, Desarrollo Tecnológico e Innovación. El máximo órgano de las políticas científicas y tecnológicas. Todavía no es un hecho, apenas se emitió el dictamen correspondiente por comisiones unidas de la Cámara de Diputados, pero la iniciativa ya está en marcha.

La propuesta es del diputado Gerardo del Mazo Morales, del Partido Nueva Alianza (Panal), el mismo que asumió la titularidad de la curul en octubre de 2009, al renunciar una de las llamadas diputadas juanitas, Karla Daniela Villareal, integrante de la misma organización política, aunque la legisladora fundamentó su renuncia argumentando cuestiones de salud (Milenio, 29/10/09).

El diputado Gerardo del Mazo presentó su iniciativa hace un año e incluye reformas y adiciones a la Ley de Ciencia y Tecnología, a la Ley de Educación Militar del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, al decreto de creación de la Universidad del Ejército y Fuerza Aérea, así como a la Ley Orgánica del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, y a la Ley Orgánica de la Armada de México.

De acuerdo con el proyecto del diputado Del Mazo, tanto la educación militar como la naval incluyen la formación, el adiestramiento, la capacitación, actualización y especialización de recursos humanos. Pero, sobre todo, argumenta el legislador, “tienen el deber, como la educación en general, de estar vinculadas a la ciencia, la tecnología y la innovación” (Gaceta Parlamentaria 3394-II, 17/11/11).

En general, en la breve argumentación de la propuesta se resalta que en el mundo se registra un importante avance en el terreno científico y tecnológico, lo cual ha propiciado que, en las naciones, se le otorgue prioridad a la educación y a la investigación.

En estos términos, dice el diputado, “el sistema educativo militar debe estar en el mismo camino”. Es decir, que la educación militar también incluya una importante actividad científica y tecnológica y sostenga un vínculo con el sector correspondiente.

Aunque el conjunto normativo que se piensa reformar incluye, en cierta medida, la mención a la ciencia y la tecnología en la educación militar, las reformas que se proponen sugieren hacerlo explícito donde no lo está y añadir la palabra “innovación” en todos los casos.

Por ejemplo, en la Ley de Educación Militar del Ejército y Fuerza Área, en su artículo 5, sobre los objetivos de la educación militar, en su fracción III, indicaba que uno de ellos era “vincular permanentemente la educación y adiestramiento de los militares”.

La reforma propone que ahora indique que el objetivo es “vincular permanentemente la educación, la investigación científica, el desarrollo tecnológico y la innovación adiestramiento de los militares” (sic).

Es el mismo caso para los artículos 6 y 11 de la misma ley o de la que crea la Universidad del Ejército y Fuerza Área, en las cuales se sugiere añadir que se impartirá al personal militar conocimientos científicos, tecnológicos y de innovación, o que el sistema de educación militar promoverá, organizará y realizará investigación en esos mismos términos.

Los cambios previstos no habilitarán al sistema educativo militar para realizar actividades científicas, tecnológicas y de innovación, porque su marco normativo previo ya se lo permitía con anterioridad y, de hecho, ya las practicaba. En todo caso, las reformas solamente armonizarán los conceptos con leyes que rigen a la educación en general y a la de ciencia y tecnología.

No obstante, el cambio más importante es el que propone la integración de los titulares de la Defensa Nacional y de Marina al Consejo General de Investigación Científica, Desarrollo Tecnológico e Innovación.

El Consejo General, instancia creada por la reforma de 2002 y cuya función se localiza en la coordinación de las políticas para el sector, presidido por el Ejecutivo federal y en el que participan todos los secretarios de Estado vinculados a las políticas públicas en ciencia y tecnología (actualmente son nueve secretarios).

Además, incluye al director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), al coordinador del Foro Consultivo, al presidente de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), un representante de la Conferencia Nacional de Ciencia y Tecnología, al secretario general de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) y cuatro representantes de la comunidad científica, tecnológica y empresarial.

Un enorme Consejo General, como se podrá apreciar. En otras ocasiones ya nos hemos referido a la inoperancia de ese organismo y las contadas sesiones que ha efectuado desde que se creó, principalmente porque el Ejecutivo federal no lo convoca y porque no es funcional. Ahora, de aprobarse el proyecto de reforma, el Consejo todavía será más numeroso.

La iniciativa no es inminente. El proyecto todavía no se discute en el pleno, seguramente se modificará y faltaría ver qué dice la colegisladora. Pero plantea el inquietante asunto de la integración formal del sistema educativo militar al sistema científico y tecnológico.


Instituto de Investigaciones Económicas
Seminario de Educación Superior
TEL: 56650210, FAX: 56230116
webmaster@ses.unam.mx
Last modification: April 29 2020 11:44:32.  

Free Blog Counter